El Efecto Del Coronavirus En La Bolsa Dinamiza El Sector Inmobiliario.
Octubre 12 de 2020
El efecto de las caídas en los mercados financieros motivadas por el coronavirus ha disparado el interés inmobiliario por las principales plazas de turismo mexicano, para la
inversión inmobiliaria, especialmente en la Riviera Maya. La reorganización del patrimonio de los inversores pone el foco en la adquisición de
edificios en el centro de la ciudad y de locales comerciales en zonas prime.
El efecto del coronavirus en la Bolsa se deja notar en el sector inmobiliario mexicano. Después del lunes negro que vivieron los mercados, el S&P/BMV IPC, principal índice de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), cerró con una ganancia de 2.16 por ciento y se ubicó en 39 mil 565.44 unidades. Los mercados financieros y accionarios estuvieron impulsados por un rebote en los precios internacionales del petróleo, luego de que la caída de éstos generara un fuerte impacto negativo durante la semana pasada. El avance en los mercados también estuvo impulsado por la expectativa de que la administración de Trump implemente una política fiscal expansiva para contrarrestar los probables efectos adversos del coronavirus.
No obstante, este escenario está teniendo efectos colaterales dinamizadores para el mercado inmobiliario mexicano. Y es que la falta de seguridad de las inversiones a
corto plazo ha disparado el interés de los inversores por las principales plazas mexicanas para la inversión inmobiliaria, especialmente en la Riviera Maya, donde el interés de los inversores ha aumentado un 30% en las últimas semanas. *Datos de la Revista Expansión.
No es de extrañar que en un momento en el que la volatilidad es más que notable, los inversores se muevan hacia otros sectores más seguros como el real estate en activos prime, pues en estos momentos la prioridad es minimizar el riesgo y apostar por activos estables que vayan a garantizar una rentabilidad de, por lo menos, entre el 3% y el 6%.
Dicha rentabilidad es la intrínseca que se percibe con los alquileres, sin contar el efecto del apalancamiento financiero, que puede elevar dicha rentabilidad hasta el 7,5%-8,5%.
El retorno de la inversión puede ser mucho mayor si se tienen en cuenta las potenciales plusvalías que pueden obtenerse en el momento de la desinversión.
El principal objetivo de los inversores es la reorganización de su patrimonio, las zonas con una elevada concentración de empresas y turistas siguen siendo las zonas más solicitadas por los inversores inmobiliarios.
¿Sabias que invertir en momento de crisis pude traerte ganancias y facilidades de pago aun mayores? Nosotros lo llamamos oportunidades.