calle 38 / Playa del Carmen
Agosto 19 de 2020
La Calle 38
Mientras caminas hacia el norte por la 5ta Avenida, después de pasar la Calle 34, te encontrarás con una pequeña glorieta. Ahí, bajando hacia la playa, surge una calle inconfundible gracias a los grandes árboles que parecieran querer entrelazarse entre sí para formar un arco. Por la noche, las luces cálidas que cuelgan de estos hacen el camino más romántico y bohemio.
Esta calle tiene una atmósfera especial en comparación con el ajetreo y el bullicio de la 5ta avenida. Por la noche, realmente cobra vida. Las luces de los restaurantes y bares le dan un toque colorido y singular que se mezcla con la música de cada lugar.
Hace dos años me mudé para estar cerca de la Calle 38. Hoy, no podría estar más contenta. Los paseos con mi esposo, el bebé y el perro se han vuelto mucho más agradables. Por el día, los árboles nos refrescan con su sombra. Por las noches, el ambiente que acompaña nuestra caminata alegra nuestro camino y nos hace sentir muy seguros. Algunas tardes las paso en la playa que está al final de la Calle 38. Si bien es cierto que no cuenta con instalaciones, suelo quedarme un rato bajo la sombra de una palmera leyendo un libro. Si tú prefieres algo con más vida, puedes caminar una cuadra hacia la Calle 40 donde te espera la música del DJ del club de playa La Martina.
Experiencia culinaria
Playa del Carmen ofrece una gran variedad de opciones de alta gastronomía. En la Calle 38 lo encontrarás todo: cafés, restaurantes, bares, heladerías, y ¡hasta panaderías francesas!
Para desayunar, en pocos lugares te servirán unos chilaquiles como en la Cueva del Chango, rojos, verdes, picantes, veganos, ¡cómo los quieras! Es un lugar clásico e imperdible en Playa del Carmen.
https://www.lacuevadelchango.com/
Otra opción muy mexicana es La Vagabunda, cuyas puertas abrieron a solo un paso de la playa empezando el 2019. Sin duda uno de los favoritos de los extranjeros.
Pero si lo tuyo es el pan recién horneado, LABRIOCHE es una panadería francesa artesanal que ofrece delicias tradicionales como sus tartines y viennoiseries. El único lugar en el que puedes saborear un desayuno ¡a cualquier hora del día!
Para comer Amate, un restaurante al aire libre, ofrece cocina típica yucateca bajo las copas de los grandes árboles. Al lado de las mesas corre un arroyo con peces y tortugas que le da mucha vida al lugar.
Para cenar, sin duda, mi favorito es Trujillos Cantina de Selva. Un restaurante de comida mexicana enclavado entre frondosos árboles que te harán sentir dentro de la jungla. Además de tener platillos muy poco tradicionales (y deliciosos), el espacio y el ambiente te harán conectar con lo más profundo de la madre naturaleza. No dejes de probar el Chayote con Kastakán o el Pulpo a las Brasas.
Otra oferta interesante es el restaurante-bar La Piola, un clásico en Playa. El ambiente siempre es muy agradable. Suelen reunirse tanto locales como extranjeros a degustar sus famosas pizzas. Mis favoritos: el Carpaccio de res y la Pizza Maremonti.
Estas son solo algunas opciones que yo recomiendo. Sin duda, la Calle 38 tiene algo para todos. Es tanta la popularidad que tiene hoy, que más y más establecimientos buscan abrirse espacio para poder estar en el lugar más trendy de Playa del Carmen. ¡Ven a conocerla!